martes, 31 de agosto de 2010

Chains







Hoy, más que nunca, estoy sola cielo. De verdad. Tú sabes que soy fuerte, yo se que lo soy. Pero es mi verdad, y la tuya, también.

Sabes que nunca esperé nada de la humanidad. Nada de nadie. He de reconocer que de ti un poco, pero ¿qué mas da? Todo era tan hermoso al principio... Yo sé que me deseabas a cada momento, que las horas se te hacían golpes en el corazón cuando se trataba de verme. Los primeros meses jamás apartabas la mirada sobre mi.Antes era todo tan distinto... Antes aprovechabas cualquier momento para besarme; antes buscabas horas ocultas entre recodos de mi para encontrarme, para besarme, para hacerme tuya. Era magia, la magia que nos hacía sentir y querernos.

Ahora, lo que nos mueve es la rutina. Y yo siento muchas cosas, muchísimas. Alegría, tristeza, sed, amor, odio, antagonías. Siento paz, siento dolor, inquietud, ansiedad, soledad.

Siento que no puedo dar más.



- ¿Esta nota fue escrita a las 3:00 antes del suicidio, no es así?
- Sí, señor agente - respondió Wine con lentitud - la encontré en su escritorio cuando volví de trabajar, justo a las siete de la mañana.
- Ajá - el policía dio una profunda bocanada el cigarrillo - Sabe que usted es uno de los sospechosos, ¿no es así?
- Lo imagino, señor agente - respondió con pasividad e ironía - Sobre todo porque se trata de un suicidio.
- ¿Ah, si? ¿Y si se trata de su novia, porqué se muestra tan frío? ¿Como si no ocurriese nada, eh? Usted mismo podría haberla instado a escribir esa nota. ¿Cómo fiarme de usted, si ni siquiera ha llorado por la muerte de ella?
- Sí. Yo fui la causa. ¿No ha leído acaso la nota, agente? - suspiró - Yo no la quería.

No hay comentarios: